domingo, 10 de octubre de 2010

Igual

Guardate en tu billetera los "te quiero", los "bonita" y los "chinchu", te devuelvo las llaves de tu casa y el buzo que me prestaste cada noche que tuve frío, te abrazo por todas las veces que te quiero devolver los tuyos, voy a tocar el hocico de la perra que siempre festejó cuando llegué, avisale a tu mamá que sos un pelotudo y que por eso no quiero ir a cenar, contale a tu hermana que tu cama esta deshecha y que no fui yo. Pedile a tu papá que te cuente mas sobre como ser hombre y mientras tanto llenale el vaso a quien sea que tengas al lado, espero no ser yo. No te vayas ya temprano de la facu, no tengo un café esperandote en una mano ni un beso en los labios buscándote llegar, entra mas temprano al trabajo, ya que en el mío no hay espacio y saca de tu billetera las cosas que te regalé... asi entran tus "te quiero", los "bonita" y los "chinchu".


Quería que tuvieras una cajita mía en tu casa.
Quería ser feliz porque sos distinto
y al final sos igual a lo que decís que no sos.

3 comentarios:

  1. ¿Porqué habría de ser soberbio reconocer la fragilidad? Vos sabés que contás y siempre contaste conmigo en ese y en muchos sentidos más. Ya sé que jodiéndote parezco un boludo del montón, pero en el fondo tenés que entender que nunca me cansaría de escucharte porque sos una amiga de verdad y que realmente muchas veces me pregunto por qué no nos vemos más. Ya sé que los dos estamos ocupados, que tenemos trabajos, estudios, vidas, pero tenemos que llamarnos para matear con cierta frecuencia ¿sabés?
    Estoy seguro que no hace falta aclararlo y de que no te gusta la gente melosa, pero te voy a repetir obstinadamente igual: te quiero mucho amiga. Realmente me mata que estés así porque te entiendo y te siento, honestamente me duele porque te comprendo absolutamente y porque lo que me relatás lo siento como en carne propia.
    Te repito lo que siempre te digo: no seas tan dura con vos misma, no te castigues tanto por tener puntos débiles. Sos una persona muy sensible -aunque lo ocultes- y eso debería enorgullecerte no decepcionarte. A pesar de las malas experiencias no hay que bajar los brazos, vos sabés que yo también soy muy negativo, pero hay que seguirla luchando como en todo con la vida. Si las cosas fueran tan simples quizás hasta serían aburridas. Es muy cierto que a veces las paredes son muy duras, pero en la vida las vamos a chocar hasta el cansancio y para eso están los compañeros de ruta que nos ayudan a mantener orientada la vista y firme el paso.
    Acá estoy Agus, que no te quepe la menor duda.

    Un abrazo Peronista, de tu amigo,
    Leo.

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